domingo, 3 de junio de 2012


Conaprole



La misión de Conaprole consiste en recoger, procesar y comercializar toda la leche producida por nuestros socios cooperarios con los máximos niveles de eficiencia de forma de mejorar sostenidamente sus ingresos y su calidad de vida.
Para ello, nos comprometemos a:
-Entregar valor a nuestros clientes a través de productos de excelente calidad.
-Generar un ambiente de trabajo que permita el desarrollo de nuestra gente.
-Llevar adelante con nuestros socios estratégicos – distribuidores y proveedores- un relacionamiento basado en la cooperación y en la búsqueda de oportunidades de beneficio mutuo.
-Aportar valor a la comunidad, a través de una política de excelencia en responsabilidad social y una cuidadosa gestión del medio ambiente.



El 1° de Junio de 1936 nace la cooperativa Nacional de Productos de Leche, una empresa de realidades y de sueños.

La primer sesión fue presidida por el Dr. Andrés Pastorino, en el mismo edificio y sala de Magallanes 1871, en que el Directorio ha seguido sesionando hasta el día de hoy.
Era una época en la que los productores no tenían asegurada la venta diaria de su producción, la población no tenía asegurada su alimentación, y el Estado no podía garantizar la higiene del producto. Tratando de solucionar todos esos problemas nace la mejor industria privada del país, en un proceso que se gestó en los salones del Ferrocarril Central de Uruguay, donde sesionaba su directorio honorario.
Fue allí donde llegó la nota de la Asociación Nacional de Productores de Leche, que en representación de los productores se hacía presente, felicitando al Directorio recién nombrado y augurándole el éxito que nadie se atrevía a imaginar.
Cinco empresas, pasaron a formar el patrimonio inicial de esta cooperativa que aseguró a todos los productores la compra de su leche, le aseguró a la población el abastecimiento diario, a la intendencia Municipal de Montevideo la higiene de la Producción y al estado una administración transparente.
Esos primeros meses de vida fueron muy fructíferos, se organizaron las líneas de distribución de leche desde los tambos a las plantas.

El criterio fue práctico: la leche que venía por Ferrocarril se recibía en lo que desde aquella época se conoció como Planta 2, situada a pocos metros en la Estación Central, con un ramal de vías férreas llegando hasta la planchada; en la Planta 1 se recibía la leche que traían los camiones.
Largas discusiones sobre las características del envase lo terminaron cambiando de papel parafinado por la botella de vidrio. Y la integridad del producto y la salud de la población eran los temas analizados, la parafina se desprendía con los golpes y quedaba en la leche alterando el producto.

Productos