Conaprole
La misión de Conaprole consiste
en recoger, procesar y comercializar toda la leche producida por nuestros
socios cooperarios con los máximos niveles de eficiencia de forma de mejorar
sostenidamente sus ingresos y su calidad de vida.
Para ello, nos comprometemos a:
-Entregar valor a nuestros
clientes a través de productos de excelente calidad.
-Generar un ambiente de trabajo
que permita el desarrollo de nuestra gente.
-Llevar adelante con nuestros
socios estratégicos – distribuidores y proveedores- un relacionamiento basado
en la cooperación y en la búsqueda de oportunidades de beneficio mutuo.
-Aportar valor a la comunidad, a
través de una política de excelencia en responsabilidad social y una cuidadosa
gestión del medio ambiente.
El 1° de Junio de 1936 nace la
cooperativa Nacional de Productos de Leche, una empresa de realidades y de
sueños.
La primer sesión fue presidida
por el Dr. Andrés Pastorino, en el mismo edificio y sala de Magallanes 1871, en
que el Directorio ha seguido sesionando hasta el día de hoy.
Era una época en la que los productores
no tenían asegurada la venta diaria de su producción, la población no tenía
asegurada su alimentación, y el Estado no podía garantizar la higiene del
producto. Tratando de solucionar todos esos problemas nace la mejor industria
privada del país, en un proceso que se gestó en los salones del Ferrocarril
Central de Uruguay, donde sesionaba su directorio honorario.
Fue allí donde llegó la nota de
la Asociación Nacional de Productores de Leche, que en representación de los
productores se hacía presente, felicitando al Directorio recién nombrado y
augurándole el éxito que nadie se atrevía a imaginar.
Cinco empresas, pasaron a formar
el patrimonio inicial de esta cooperativa que aseguró a todos los productores
la compra de su leche, le aseguró a la población el abastecimiento diario, a la
intendencia Municipal de Montevideo la higiene de la Producción y al estado una
administración transparente.
Esos primeros meses de vida
fueron muy fructíferos, se organizaron las líneas de distribución de leche
desde los tambos a las plantas.
El criterio fue práctico: la
leche que venía por Ferrocarril se recibía en lo que desde aquella época se
conoció como Planta 2, situada a pocos metros en la Estación Central, con un
ramal de vías férreas llegando hasta la planchada; en la Planta 1 se recibía la
leche que traían los camiones.
Largas discusiones sobre las
características del envase lo terminaron cambiando de papel parafinado por la
botella de vidrio. Y la integridad del producto y la salud de la población eran
los temas analizados, la parafina se desprendía con los golpes y quedaba en la
leche alterando el producto.
Productos